En nombre del Colegio de Abogados en Derecho Médico, reciban un cordial saludo de bienvenida a nuestro Primer Congreso Internacional en Derecho Médico y Bioderecho. En primera instancia quiero agradecer a nuestros asistentes a este evento virtual, que cerró inscripciones con más de 500 personas entre comunidad académica y jurídica del derecho y del sector salud, así como a la siempre entusiasta comunidad estudiantil, motor determinante en este ejercicio que emprendimos quienes tenemos el honor de participar en la formación de las nuevas generaciones del Derecho Médico y Sanitario.
A las entidades del sector que se sumaron al Congreso, lo que reafirma su pacto con la mejora continua del sistema; a las Universidades, que desde nuestra creación han acogido los temas propuestos por el Colegio con el mayor respeto y compromiso; a nuestros destacados conferencistas que nos hacen el honor de poder contar con su participación y darle la oportunidad a nuestros asistentes de recibir ese profundo conocimiento y experiencia; a nuestros invitados internacionales lo que nos invita a fortalecer y estrechar esas relaciones; a la asamblea de miembros del Colegio por su participación en todos los espacios de antesala a este congreso, como los foros regionales, los conversatorios, la consolidación interna de ideas, sin dejar de lado a nuestra Junta Directiva siempre activa y propositiva, al comité académico liderado por nuestra querida Piedad Bolívar cuyo aporte al Colegio es invaluable, a la dirección administrativa por su compromiso y esfuerzo, y a todos quienes se sumaron a la logística para hacer de nuestro Congreso el más importante espacio en Derecho Médico y Bioderecho realizado en Colombia en los últimos años, y que esperamos se pueda calificar como de los escenarios más representativos hoy en su temática en Latinoamérica, a todos ustedes mil gracias por confiar en el Colegio para consolidar este importante espacio de formación.
Acto de Apertura Cuando iniciamos nuestro estudio en los temas del Derecho Médico, siempre ronda en nuestra mente como idea central el acto médico, o la relación médico paciente, pero los cambios permanentes en los sistemas de salud, su complejidad técnica, normativa, ética, bioética, operativa, y de responsabilidad, ha conllevado a que la concepción y teoría del derecho médico se encuentre en constante evolución, y los actuales desafíos que enfrenta la humanidad en materia de salud y asistencia sanitaria implica el permanente desarrollo de los estudios jurídicos en derecho médico y Bioderecho, el que podemos entender entonces como esa correspondencia del derecho con la vida humana, y como en ella interactúan nuevas técnicas, procedimientos, alternativas terapéuticas, tecnologías biomédicas y de ingeniería genética, que siempre generan fuertes tensiones éticas y jurídicas, por lo que el derecho médico en toda su extensión se debe ofrecer como una respuesta a fin de propender por el equilibrio en las políticas públicas, los derechos de los pacientes y sus correlativos deberes, el talento humano en salud, las instituciones del sector, la integración de la tecnología a la atención médica en beneficio de la vida humana, para hacer entonces frente común a los actuales desafíos que en materia de salud tiene la humanidad, pues retos como el SARS COV-2 que ha puesto a prueba los sistemas sanitarios del mundo-, también pone a prueba el compromiso de quienes nos dedicamos al estudio y aprendizaje de esta disciplina, de manera tal que es necesario que el Derecho Médico impacte positivamente en los Sistemas de Salud y de Seguridad Social en Salud, en el Bioderecho, la Bioética, la Responsabilidad médica y sanitaria, los datos en salud, los riesgos, los registros médicos, los servicios, las tecnologías, y los medicamentos, aspectos que hemos estructurado como ejes centrales de este evento.
Es así entonces que en el escenario de las políticas públicas, el Derecho Médico debe acompañar a las autoridades sanitarias del mundo para dedicar pensamiento, esfuerzos, y recursos que permitan romper la impactante brecha existente en los sistemas de atención entre un ser humano y otro, y cuyos costos de accesibilidad impactan seriamente los índices de pobreza en las naciones menos desarrolladas, de tal forma que se pueda asegurar entonces que la oportunidad, accesibilidad, universalidad y calidad en la atención en salud son componentes estructurales del derecho humano fundamental a la salud, entendido siempre como de carácter universal.
JESÚS ALBREY GONZÁLEZ PÁEZ
Presidente Colegio de Abogados en
Derecho Médico.
Memorias
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